lunes, 11 de abril de 2011

Bogdan

Hoy teníamos criterium internacional con la participación desde Ucrania de un joven amante del btt. Habíamos dejado el coche tras conducir 2 km por una pista irregular que sale una vez coronado el coll d'ares. Pista que tendríamos que deshacer pero ahora cabalgando. Después de un poco de asfalto a la izda saldría el sendero que nos llevaría a esta puerta. El objetivo del día era doble: compartir con Bogdan el placer de pedalear por la montaña y visitar la torre del Mir (o al menos eso creo...), por cierto, muy bien restaurada por dentro y con unas espectaculares vistas desde la parte alta.


Después de un par de años pedaleando por las montañas empiezo a reconocer algún valle, sierra o pico. Esta vez con la ayuda de Joan pudimos ver la granja en la que compramos miel durante nuestro tour del vallespir. "Joan, vete pensando una ruta para volver porque la miel era de primera calidad y a mí no me llegará con el bote que tengo ahora en casa".















Después de reponer fuerzas empezaba la parte más divertida para todos que era bajar por senderos alejados del mundanal ruído y con ese punto de dificultad que te hace mantener la tensión continuamente. Dos cosas iban quedando claras a medida que avanzaba el día:
Bogdan gastaba todas las fuerzas al instante, es lo que tiene la juventud, así que pasaba de marcar el ritmo a pedir un tiempo muerto para reponerse
Y le gustaba tanto como a mí jugar con la bici sobre cualquier obstáculo del camino


También aprendió que no todo es pedalear cuando se sale a hacer btt, al menos cuando la ruta la ha preparado Joan que viene a ser casi siempre

De todas maneras yo diría que le quedó buen sabor de boca como para volver a repetir. To be continued...